Crema solar SPF 25 Amapola bio-cosmetics

Hola!

Ahora que ya el verano nos va diciendo adiós, quería dar mi experiencia sobre el protector solar de Amapola bio-cosmetics con factor de protección del 25 que he ido utilizando en estos meses.

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1º de todo, o la razón principal por la que lo compré es porque su filtro solar es inorgánico (también conocido como físico o mineral) y es el óxido de zinc, no contiene dióxido de titanio, ni viene con nanopartículas. Es según mucha información leída, la mejor manera de protegerse del sol a través de una crema, porque no penetra en la piel sino que hace un efecto de pantalla y refleja los rayos UVA y UVB, y el óxido de zinc es el filtro más seguro que nos podemos encontrar.

Una curiosidad que tiene, es que tanto el lote como la fecha de caducidad aparece a modo de pegatina (y no grabada en el propio envase, como suele ser habitual cuando el producto viene sin caja exterior).

Su INCI: AQUA, ZINC OXIDE, CAPRYLIC/CAPRIC TRIGLYCERIDE, ARGANIA SPINOSA (Argán) KERNEL OIL*, PERSEA GRATISSIMA (Aguacate) OIL*, ALOE BARBADENSIS (Aloe Vera) LEAF JUICE*, BUTYROSPERMUM PARKII (Karité) BUTTER*, CETEARYL ALCOHOL, MAURITIA FLEXULOSA (Burití) FRUIT OIL, GLYCERIN*, GLYCERYL ISOSTEARATE, CETEARYL GLUSIDE, BENTONITE, LAVANDULA HYBRIDA (Lavandín) OIL*, CITRUS LIMON (Limón) FLOWER/LEAF/STEM OIL, TOCOPHERYL ACETATE, BENZYL ALCOHOL, POLYHYDROXYSTEARIC ACID, ALTHAE OFFICINALIS (Malvavisco) LEAF EXTRACT*, XANTHAN GUM, DEHYDROACETIC ACID, BENZOIC ACID, SORBIC ACID, CITRIC ACID, SODIUM BENZOATE, POTASSIUM SORBATE, LIMONENE**, LANALOOL**, CITRAL**, GERANIOL**, CITRONELLOL**, AMYLVINYLCARBINYL ACETATE**, COUMARIN**. * Ingrediente ecológico certificado. ** Ingrediente procedente de los aceites esenciales.

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¿En qué momentos lo uso?

* Para la playa, contando que como mucho suelo ir máximo 2 horas al día, me lo pongo por todos los lados.

* Para el día a día en verano: cara, brazos y piernas. En lo que se refiere al rostro, yo no me maquillo después, con lo que no puedo valorar si es fácil maquillarse encima o si hay que trabajar mucho para que quede fijado.

Cosas a favor según mi prioridad:

– Aunque a la vista parece una crema densa y contundente, al extenderla por la piel, se vuelve bastante ligera y se trabaja de forma cómoda para que se integre. No deja rastro blanquecino aunque sí algo brillosa. Mi truco es ir aplicando el protector de poco en poco y repetir como en capas finas para no acumular de golpe mucho producto y que a la piel le cueste más absorberlo.

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– El olor es muy fresco, a mezcla de cítricos y de fondo se nota ese toque sutil del aceite de argán y la manteca de karité.

– El envase es de tapón que hace clic con lo que es ideal para cuando tienes luego las manos con la crema y porque no lleva aerosol. Además a trasluz sí puede verse lo que nos queda de producto.

– La composición vegetal que lleva, llegando al 62% de ingredientes ecológico y certificado por bio.inspecta, que me aporta más seguridad de lo que me estoy poniendo en la piel. Además es biodegradable, con lo que no aportamos un extra de porquerías al medioambiente.

– Entre los ingredientes, mención especial al aceite de burití que actúa como antioxidante, nos aporta elasticidad, y nos nutre e hidrata de forma saludable. Pero no puedo dejar de indicar otros aceites como el de argán, aguacate, lavandín y limón, el jugo de aloe vera, la manteca de karité y el extracto de malvavisco, que también aparecen en la fórmula. Me encanta y es de valorar.

– El precio de 26€ para 200ml y con la formulación, me parece de lo mejor que he visto. Además cuando lo compré en la web de bioferta.com estaba al 15% de descuento, así que fueron poco mas de 22€.

– Para retirarlo ya en casa, no resulta ni difícil ni algo tedioso, en la ducha con el gel de siempre y sin rastro.

– Y por supuesto, te bronceas igual de rápido que otros protectores más convencionales.

Cosas que no me han gustado:

– En mi caso, al contacto con el agua del mar, sí que aflora el rastro blanquecino. Y cuando ya estás morena, se nota bastante, pero me lo tomo a modo de recordatorio, de ojo, protégete del sol. Lo que hago es secarme un poco con la toalla y masajearme un poco para volver a incorporar el protector a la piel.

Veredicto:

Mientras no encuentre otro producto que supere a éste, me quedaré con él un año tras otro. Me he sentido muy a gusto utilizándolo, no sólo por mí y la calidad de mi bronceado, sino por la conciencia de lo que hay detrás.

Aloha!