Hola!
Sigo descubriendo productos de la marca Evolve y con el tiempo creo que cada vez la valoro más.
Quizás siento que es demasiado minimal como para que el precio sea un poco excesivo, pero voy comprobando que tiene su punto sofisticado que hacen que sus composiciones sean diferentes dentro de que son sencillas.
Este bálsamo limpiador suave para todo tipo de pieles con vainilla, baobab y rosa orgánicos, prácticamente todo su contenido me resulta conocido y en consecuencia, me aporta seguridad.
¿Qué lo hace especial?
- Aceite de baobab orgánico (pos. 6): nutre, mejora la elasticidad y regenerante. Rico en antioxidantes por lo que protege del daño de los radicales libres y ayuda con el envejecimiento.
- Extractos de azúcar (pos. 5, 10 y 12): al combinar con el agua se transforma en leche y deja un rostro limpio, calmado e hidratado.
- Aceite de vainilla (por. 8): antioxidante, junto a su aroma que relaja y calma.
Su INCI: Caprylic /Capric Triglyceride, Glycerin**, Helianthus Annuus (girasol) Seed Oil, Prunus Amygdalus Dulcis (almendra dulce) Seed Oil*, Sucrose Laurate, Adansonia Digitata (baobab) Seed Oil*, Citrus Aurantium Dulcis (naranja) Fruit Water*, Vanilla Planifolia (vainilla) Fruit Oil, Rosa Damascena Flower Oil*, Sucrose Stearate, Tocopherol, Sucrose Palmitate. *Ingredientes de procedencia orgánica. **Hecho utilizando ingredientes ecológicos.
El 100% del total es de origen natural y un 50% del total es orgánico.
A medida que lo estoy usando me va gustando más, sobre todo lo que es la aplicación, el masaje, el olor, es un momento de disfrutar.
Su textura es de bálsamo pero según lo vas extendiendo, con el calor de la piel, se funde, se vuelve más ligero y puedes hacerte un suave masaje para ir levantando toda la suciedad o el maquillaje. Esta sensación de paz es mayor porque tiene un aroma que recuerda al azúcar requemado pero sin ser invasivo, ni dulzón ni nada parecido. Luego he revisado que también contiene vainilla con lo que conectas igualmente con el dulce pero es un toque natural.
El masaje ha de ser con el rostro seco e incluyendo la zona de los ojos. Luego incorporar algo de agua tibia para que se genere la leche, hacer otro poquito de masaje y después retirar con algo más de agua.
Odio perfumes de vainilla o de coco porque son olores sintéticos, exagerados y que en realidad, apestan. Así que cuando te encuentras con su olor fresco, sí que me gustan. El verano pasado me hice adicta al coco ecológico del LIDL y está delicioso.
En cuanto a fechas sólo está impresa los 12 meses que dura una vez abierto.
En fin, que voy a otras cosas. Lo que menos me ha gustado sería el residuo que deja en la piel, necesitas algo después para retirar (supongo que es algo inherente en el concepto del tipo de producto). En mi práctica lo que hago es aplicar el gel limpiador justo después, sin usar muselinas o esponjas que arrastren el residuo. Me gusta así, mi rostro queda limpio, aunque ya digo que de maquillaje sólo utilizo polvos bronceadores con lo que soy poco exigente con ese 1º paso porque con el 2º sí que confirmo la retirada de toda suciedad que pudiera acumular de todo el día.
También hay veces que deja neblina en los ojos durante unos segundos, entiendo que es porque al transformarse en leche y al aclarar se puede acumular una pequeña parte dentro de los ojos y veo más tarde un hilillo blanco que me tengo que retirar con cuidado. No siempre pasa y según han pasado los usos, ha ido a menos, supongo que es acostumbrarse a utilizar bien el producto.
¿Dónde comprar?
En Naturisimo por supuesto, ya que es aquí donde compré el kit que lo contenía. Tienen 3 formatos: 30ml £10 (el que tengo yo), 120ml £25 y 180ml £32.
Y también lo he visto en Druni, 120ml a 30€.
Mi experiencia ha sido de 10. El formato pequeño creo que es el que mejor encajaría conmigo, cunde mucho porque sólo con lo que recojas en los dedos en 2 ocasiones te cubre todo el rostro, y tiene ese toque sensorial que busco en los productos. Con el tiempo, sí que me veo repitiendo.
Aloha!
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